La más absoluta vergüenza futbolística otra vez el sábado con lo que se vio en el campo del Egáleo, en el partido entre los de casa y el Olympiacós B.
Presenciamos la ridiculización total de las reglas deportivas −y por extensión del producto que se llama fútbol− cometido esta vez por los árbitros de turno, los que designan Mándalos, Bennett, Baltakos o cualquiera que ocupa fraudulentamente la directiva de esa entidad ilegítima que lleva el cartel de «Federación de Fútbol Helénica».
En el partido del sábado, los que aparecieron en el campo como «árbitros» de la contienda alteraron el resultado ¡al anular un gol al goleador que estaba cubierto por al menos tres defensas!
Árbitros «guillotina» ha habido también en partidos anteriores de nuestro equipo, repitiéndose estos casos además en otros partidos de la categoría, que determinan el destino de los equipos y la competición en conjunto.
El OLYMPIACOS FC es uno de los equipos que solicitaron y fueron pioneros en la consolidación de los equipos B, siguiendo el ejemplo de las ligas europeas más importantes, por dos razones: en primer lugar por cuestiones de desarrollo.
Como club que invierte desde hace años en el funcionamiento de la cantera, consideramos que el funcionamiento del equipo que compite en una liga profesional y que representa un trampolín para el primer equipo, tiene efectos positivos para nuestros futbolistas en lo que se refiere a experiencias y rendimiento.
Y en segundo lugar, para contribuir a la mejora del producto que representa la segunda categoría profesional de la Superliga 2, que está considerada como una de las categorías profesionales más corruptas de Europa según las estadísticas oficiales de Sportradar.
Por desgracia, con cada vez más frecuencia comprobamos que esto es casi imposible. Lamentamos que haya tantísimos oscuros corredores de apuestas, granujas y estafadores en la categoría que no dejan a los pocos honrados y serios hacer las cosas a la manera debida, como requiere una categoría profesional para subir el nivel.
Con más frecuencia cada vez nos damos cuenta como no tiene ningún sentido invertir en una cloaca. Y que nada bueno va a suceder desde el momento en que algunos −no desde fuera, sino desde puestos de responsabilidad− quieren seguir manteniendo esta cloaca y agrandarla aún más.
En estas condiciones, el OLYMPIACOS FC se plantea muy en serio dejar de tomar parte en dicha categoría.