Míchel firmó su nuevo contrato con el Olympiacós y a continuación se presentó a los medios de comunicación. El técnico español, que vuelve al banquillo de los rojiblancos, expresó su gran alegría por trabajar de nuevo con los campeones de Grecia y manifestó su certeza de que el equipo va a lograr incluso mejores resultados que en su primera época.
En primer lugar señaló:
«Desde el domingo he vuelto a ser un hombre feliz. Ya el hecho de poder estar debatiendo mi vuelta al Olympiacós era una aspiración y una ilusión para mí. Siempre he expresado con mi gente, mi familia y mis parientes, con todos mis amigos lo bien que lo pasé con el Olympiacós y en Grecia, lo mucho que quise al equipo y a este país y en este momento queda claro que aquí he dejado muchos queridos amigos. Me encantaría poder volver a vivir y tener la misma disposición y la misma alegría que vivimos entonces, pero para ello necesitamos victorias.
Sé que he venido a un grandísimo club con muchísimos aficionados, procedentes de un amplio estrato social, que ama al club no solo porque gane y no solo cuando gana. Tengo una responsabilidad enorme. Quien lleva la camiseta del Olympiacós tiene que saber, y todos los sabemos, que lo más importante es el nombre que pone delante de la camiseta y no el que pone detrás. Vamos a evocar el pasado para que se vuelva presente, tal y como queremos. Solo hay una manera de conseguirlo. Podemos lograrlo solo con humildad, trabajo duro y responsabilidad. Sabemos que hemos vivido muchos momentos bonitos, pero lo logramos con mucho trabajo, con responsabilidad, con aplomo y confianza. No solo porque teníamos nombres famosos. Tenemos buenos jugadores y no solo son importantes sus nombres.
Hay una cosa que me gusta mucho, que el presidente y todos los que trabajan para nuestro presidente me han confiado toda la responsabilidad a mí. Me han puesto responsable de todo. El color de mi pelo va a sufrir, pero mi espíritu se va a alegrar mucho. Os doy las gracias, pero ahora debemos dejar de hablar y empezar a trabajar con humildad porque esto es lo que necesitamos ahora más que nunca.»
¿Cómo se produjeron los contactos para esta segunda época en el Olympiacós y con cuántos jugadores querría trabajar, dado que hay muchos en este momento en el centro de entrenamiento?
«Los contactos se desarrollaron muy rápidamente, la persona que me llamó el domingo está entre nosotros y la respuesta fue inmediata: “¿A qué hora es el entrenamiento el domingo?”. Os lo digo para que comprendáis que hubo deseo e intención de retornar al Olympiacós desde el principio. Lo estaba esperando y ya estuvimos cerca en un momento pasado. En cuanto al número de jugadores, es un problema tener tantos, es un inconveniente tanto para el entrenador como para el equipo mismo y los futbolistas. Por ello he pedido al presidente que no tengamos más de 24 jugadores, aparte de los porteros. Esto ha parecido razonable a todos porque dará la oportunidad a algunos jugadores, a jugadores que no están dentro de la lista europea, que son muy importantes para nosotros. Lo que he pedido no es fácil, pero sé cómo se va a hacer.»
¿Qué debe cambiar en el Olympiacós? ¿Tiene en mente qué debe hacer exactamente?
Sé que estamos atravesando una situación difícil en este momento, pero tenemos la capacidad de superarla. Tenemos jugadores muy buenos. Tenemos tiempo por delante, tenemos la intención de que se calmen un poco las cosas. Sabemos muy bien las dificultades no solo en lo que se refiere a la sensación de que atravesamos una situación difícil, sino también por lo que muestran los resultados. Esto podría volvernos pesimistas, pero somos realistas y sabemos los jugadores que tenemos, las habilidades que tienen y sabemos cómo podemos transformar todo esto en un buen rendimiento. Tenemos algo que los otros no tienen, el continuo e indiscutible apoyo de nuestros aficionados, y esto no tiene precio. Sabemos que quieren que nuestro equipo gane y juegue bien».
¿Qué es lo primero que va a cambiar en cuanto llegue a Rentis?
«Lo que es obvio. Vamos a mirar a la cara a los jugadores y vamos a intentarles subir la moral, que está muy baja lógicamente por los malos resultados. Hay algo que es incuestionable y de lo cual no vamos a hablar y esto son las victorias. Para lograrlo, necesitamos buenos futbolistas y los tenemos. Si los futbolistas ganan autoconfianza y creen en las capacidades que tienen, van a darse cuenta de su superioridad y entonces seguro que las cosas irán aún mejor. No hace falta que crean en el entrenador, sino en sí mismos y que se den cuenta del club en el que están. Y esto es lo que vamos a hacer.»
¿El Olympiacós es un club inolvidable para usted? Si es así, ¿por qué? Además, ¿considera que puede conseguir lo que no pudo lograr tal vez en la época anterior?
«La verdad es que mi paso por el Olympiacós fue inolvidable para mí, es una etapa que se me ha quedado grabada y me sentía realmente uno de vosotros. Por eso continuaba siguiendo al equipo y lo seguía queriendo. Más que los resultados, lo que me hacía feliz aquí era la psicología que había en el equipo, el ambiente, que estoy seguro que dentro de muy poco vamos a recuperarlo. Esta vez vamos a estar como en mi primera vez en el Olympiacós y todavía mejor. Veo todavía mejores jugadores. Quiero que sientan que son mejores y creo que ellos mismos lo van a entender también.»
¿Qué tan importante es para usted que haya en el equipo jugadores como Marcelo o James?
«En las 24 horas que llevo en Atenas todos me preguntan por Marcelo. Y lo que me dicen no es lo buen jugador que es, porque esto lo sabe todo el mundo, sino lo humilde que es como jugador. Y esto es una característica común de la personalidad de cualquier jugador que haya triunfado en el Real Madrid. Esto es un ejemplo magnífico para cualquier club de Europa y para cualquier vestuario. Todos quieren tener un compañero de equipo como él. Te enseñan a cómo competir, a cómo respetar a cualquier rival sin minusvalorarlo, aunque juegues en un club tan grande como el Olympiacós. Os prometo que veréis grandes noches de fútbol con jugadores como Marcelo y James. Y el recuerdo que van a dejar va a ser aún mayor, con su personalidad. Realmente son brillantes ejemplos de carácter y personalidad. Y no puedo olvidar hablar también del exquisito gusto de nuestro presidente para elegir jugadores de diversos equipos.»
