-¿Es de esas derrotas que pese al resultado, pueden ayudar a levantar la moral del equipo?«Las derrotas son siempre derrotas. Sabíamos desde el principio las dificultades que tendríamos que afrontar ante tal equipo. Creo que ha sido muy positivo el hecho de que con el 1-0 con el que empezamos la segunda parte y hasta el segundo gol, se escuchaban en el campo nuestros aficionados y que estaban muy contentos de la imagen que ofrecía el equipo. Por supuesto, hay que reconocer que esos dos minutos eliminaron todas las esperanzas que habían empezado a crearse, viendo al equipo ocupando todo el campo y trantando de salir más al ataque. En líneas generales, hemos hecho un buen trabajo frente al mejor equipo del mundo y ahora debemos volver a Atenas y pensar en el PAOK. Tenemos tiempo por delante para los siguientes tres partidos de la UEFA Champions League y ver qué podemos lograr en la UEFA Europa League.»
-Alberto Botía ha dicho que lo importante es que os íbais con una sonrisa del campo. ¿Os vais realmente con una sonrisa?«No puedo decir una sonrisa, pero creo que cuando sigues un plan en el juego y de alguna manera ves que funciona, seguro que te sientes de algún modo mejor. ¿Una sonrisa? Pues no, no me voy con una sonrisa.»