La gran iniciativa del Presidente del Olympiacós, Sr Evangelos Marinakis, que consiste en albergar en Grecia el congreso de la Universidad de Harvard “Reforzando, Atravesando y Trascendiendo Fronteras: El Fútbol en el Mundo Globalizado” está ganando apoyos. El Principio de Atenas, redactado por el académico Sr. Hanam y firmado en primer lugar por el Sr. Marinakis, el cual trata sobre el derecho a participar en el deporte, empieza a contar con un gran respaldo, como se esperaba, y del más alto nivel: nada menos que el histórico Barcelona, el club con la mayor cantidad de socios del planeta, que acaba de firmar dicho “Principio de Atenas” de la mano de su presidente, Josep Bertomeu.
En el marco del gran encuentro que enfrentará a nuestro equipo y el Barcelona la noche del miércoles en el Camp Nou, los blaugrana han sumado fuerzas a esta causa. El presidente Bertomeu aceptó con entusiasmo y dio su visto bueno al contenido del “Principio de Atenas” sobre el derecho a participar en el deporte, que firmará una hora antes del comienzo del partido en el Camp Nou en presencia del Sr. Evangelos Marinakis. El Olympiacós muestra una vez más el camino a seguir y lidera este esfuerzo especialmente importante centrado en los valores humanos. Una vez más, una importante iniciativa de carácter social por parte del Sr. Evangelos Marinakis y el Olympiacós FC que goza de correspondencia inmediata y respaldo en el gran Barça, ¡cuyo lema no es otro que el de “mes que un club”!
Principo de Atenas por el Derecho a la Participación en el Deporte
El deporte proporciona valores y destrezas para toda la vida con un amplio impacto en la vida de la gente. Refuerza la autoestima, inspira a los jóvenes y ayuda a eliminar los prejuicios. Tiene la capacidad de trascender las fronteras y acercar a la gente, independientemente de la raza, el género, la religión, cultura o nacionalidad.
La industria del deporte ha crecido significativamente en los últimos años. Los clubes de fútbol tienen aficionados y fervientes seguidores en todo el mundo, los cuales pertenecen a todas las clases sociales. Esta amplia base de apoyo contribuye extender la presencia de los clubes en los medios de comunicación social y la creciente atención que gozan de la prensa.
Esta visibilidad extendida hace posible que clubes y jugadores influyan notablemente en la opinión pública y que participen de la responsabilidad social añadida que entraña tal influencia. Dicha responsabilidad se amplia para garantizar que cada vez más personas puedan practicar su deporte favorito, sin tener afrontar discriminaciones o prejuicios.
La responsabilidad de clubes y jugadores para fomentar la participación universal en el deporte es de una importancia todavía mayor en una época en la que la cantidad de personas desplazadas en todo el mundo a causa de conflictos o persecuciones ha alcanzado su punto más alto en la historia. Según el Alto Comisionado de la ONU para los Refugiados, cada minuto son desplazados de sus hogares 20 personas, de las cuales un gran porcentaje está formado por niños sin tutela, así como hombres y mujeres con discapacidad.
Teniendo como eje el objetivo de lograr la participación universal, la Carta Internacional del Deporte de la Unesco de 2015 confirma de nuevo que el derecho al deporte es un derecho fundamental de todos. No obstante, muchas personas están desprovistas todavía de este derecho por la falta de oportunidades, por no tener acceso o afrontar prejuicios. Por lo tanto, es una responsabilidad de los clubes y las organizaciones deportivas ayudar de manera que se amplíen los beneficios de la participación en el deporte a todos los miembros de las sociedades, especialmente a aquellos que pertenecen a colectivos marginalizados o vulnerables.
Con arreglo a la responsabilidad social y en sintonía con los derechos y deberes establecidos en la Carta del Deporte de la Unesco, acordamos fomentar, apoyar y materializar los siguientes 12 Principios:
1. Esta declaración constituye un marco común de logros para los clubes, equipos y organizaciones deportivas de todos los deportes, con el objetivo final de que cada individuo o empresa aspire, mediante la educación y el ejemplo, a fomentar el respeto hacia estos derechos y a garantizar con eficacia su reconocimiento y cumplimiento.
2. Cada ser humano tiene el derecho fundamental de practicar deporte sin discriminaciones sobre la base de la nacionalidad, género, orientación sexual, lengua, religión, opiniones políticas u otras, origen nacional o social. Asimismo, no debe haber discriminaciones generadas por el estatus político o internacional del país o del territorio al que pertenece el individuo. Los clubes y las organizaciones deportivas deben mostrar un rechazo activo y negarse a participar en cualquier acción discriminatoria a nivel profesional o de aficionado.
3. La participación en el deporte deberá basarse en los principios de la competición saludable y honesta, así como del respeto a todos los que compiten.
4. Se deben respaldar las iniciativas que animan la participación de población desplazada, independientemente de su estatus civil, en actividades deportivas.
5. El deporte para la gente joven debe de estar basado, en primer lugar y principalmente, en la participación, la actividad física y la diversión.
6. Las chicas deben tener igual acceso que los chicos al deporte y los equipos deportivos, especialmente en el marco escolar, así como a competiciones y campeonatos juveniles.
7. Todos deben tener igual acceso, sin discriminaciones, a la actividad física, a los recursos y servicios, así como la oportunidad de participar en los procesos de supervisión y toma de decisiones a todos los niveles del deporte.
8. Los clubes y las organizaciones deportivas se ponen de acuerdo en animar a una mayor participación en el deporte en zonas afectadas por conflictos o áreas desfavorecidas económicamente y, cuando sea posible, a contribuir económicamente de diversas maneras, entre las cuales, proporcionar equipamiento usado pero en buenas condiciones para el uso por parte de cuantos no disponen de los recursos económicos necesarios para participar en el deporte.
9. Se deben proporcionar lugares seguros, además de infraestructuras, equipamiento y vestimenta adecuados para satisfacer las necesidades de todos los participantes en el deporte, teniendo en cuenta las diversas necesidades asociadas con gente de diferentes culturas, géneros, edades y habilidades.
10. Las infraestructuras deportivas deben construirse de modo que sean accesibles a un todavía mayor porcentaje de personas de la población mundial.
11. Debe declararse un Día Mundial del Derecho al Juego, para confirmar de este modo el derecho a participar en el deporte y con el objetivo de fomentar los principios expuestos en la presente Declaración.
12. Deben de desarrollarse iniciativas para crear acuerdos de cooperación con investigadores y ONGs, cuya labor contribuya a materializar estos principios.